Escenario.- Indicaron los integrantes del sector que como la presa registra bajos niveles de agua, y luce menos impactante a la vista, cayó interés de los visitantes por acudir al lugar turístico por excelencia

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Milton Cortés Gutiérrez

Al menos una veintena de comerciantes que dependen de las actividades en la Laguna de Tecocomulco han resultado afectados con la disminución del número de visitantes debido a los bajos niveles del humedal y en principio, al exceso de alga marina.

Señalaron que ante la sequía que afecta tanto a la región del Altiplano como a muchas otras, los comerciantes y prestadores de servicios atraviesan por una de las crisis más complicadas en los recientes años.

Indicaron que el hecho que la presa registre bajos niveles de agua y luzca menos impactante a la vista, ha reducido el interés de los visitantes por acudir al lugar turístico por excelencia.

Recordaron los comerciantes que la sequía es la segunda causa de afectación al comercio local, ya que el primer golpe derivó de la contaminación por la presencia de lirio acuático, apenas el año anterior.

Señalaron que no sólo los restauranteros son quienes han padecido los efectos de la disminución del turismo, sino también prestados de servicios como aquellos que se dedican a la renta de lanchas y otros atractivos acuáticos.

Los comerciantes dieron a conocer que el reciente periodo vacacional fue de contrastes; Mientras la primera semana de asueto se tuvo una mínima cantidad de visitantes, para la segunda el impacto fue mejor, sin llegar a números sumamente positivos.

Mencionaron que de continuar la ausencia de agua de lluvia, difícilmente se tendrá una recuperación de los niveles de la laguna y como consecuencia, será más lejana la posibilidad de que se recuperen todas las actividades que hasta hace algunos años se realizaban en la zona.

Para febrero de 2023 y con el apoyo de los municipios en los que se encuentra el humedal, así como por instancias estatales y federales, se retiró casi en su totalidad el lirio que la afectó por más de un año y que obligó a detener las actividades turísticas en el lugar.

Comerciantes y prestadores de servicios esperan la pronta llegada de las lluvias que concentren líquido en el humedal más importante de la zona.