AGUSTÍN RAMÍREZ

A un año de terminar su administración como alcalde de Agua Blanca, deja sin sabores toda vez que muchas de las promesas hechas al electorado quedaron en el tintero, como mejorar las vialidades de la demarcación, sobre las cuales, dicen, ya es prácticamente imposible transitar, queja recurrente de pobladores y turistas.