Acueducto: a 10 años de su reconocimiento en la Unesco

-El Patronato de Tembleque realizó la cuarta cadena humana sobre el trayecto del acueducto, que inicia al pie del Cerro de Tecajete

INGENIERÍA CIVIL

Milton Cortés Gutiérrez

Con una cadena humana en parte del trayecto del Acueducto del Padre Tembleque, talleres, conferencias magistrales y otras actividades, conmemoraron este martes, los primeros 10 años de la inscripción de la obra hidráulica al listado de patrimonio cultural de la humanidad.

El Patronato de Tembleque A.C., realizó la cuarta cadena humana sobre el trayecto del acueducto, que inicia al pie del Cerro de Tecajete y cruza parte de la cabecera municipal de Zempoala.

Los organizadores de la misma calificaron la cuarta edición de la cadena humana como un éxito, gracias al apoyo de la población de Zempoala en general, de sus comunidades, así como estudiantes de escuelas desde nivel básico hasta superior.

Señalaron que el propósito de realizar la cadena humana en el área no expuesta del acueducto, pretende visibilizar la importancia del mismo a lo largo de sus 48 kilómetros y que la sociedad esté consciente de que el cuidado del mismo no sólo se enfoca en la arquería perceptible, sino todo el trayecto de la cañería que desemboca en el municipio de Otumba, Estado de México.

Indicaron que lo importante de estas acciones es preservar la joya arquitectónica, imprimirle la importancia y el cuidado que requieren un monumento reconocido por la Unesco a nivel mundial.

Por otra parte, en el Museo Bicentenario de Zempoala se realizó la jornada cultural de conmemoración por los mismos 10 años de inscripción del monumento con talleres, ponencias y conferencias como Perspectivas Institucionales en Torno al Plan Integral de Manejo y Gestión del Acueducto, además de El Sistema Hidráulico del Acueducto Patrimonio de la Humanidad.

La secretaria de Turismo es la entidad, Elizabeth Quintanar, participó en la conmemoración en el conversatorio sobre la importancia del monumento patrimonio de la humanidad el cual tuvo su auge en el virreinato, en el renglón de conversatorios.

La funcionaria estatal destacó la participación del INAH y las dependencias involucradas en la preservación de este patrimonio cultural, así como el aspecto turístico que desde luego representa, dijo, un detonante para la industria en el pueblo mágico de Zempoala.

Señaló que estas jornadas culturales deben preservarse al igual que el monumento para que la información acerca de la importancia del mismo se transporte de generación en generación y esta obra arquitectónica se mantenga permanente como el símbolo principal del municipio de Zempoala y del país, con la distinción que le ha otorgado la Unesco desde el año 2015.